La mayoría de los estudios sobre el ayuno, se centran en encontrar cómo puede ayudar a ciertas personas a perder peso.

Pero una nueva investigación fue más allá y concluyó que genera aumentos en la actividad metabólica y ofrecen beneficios contra el envejecimiento.

Desde tiempos inmemoriales se sabe que los Ayunos Terapeúticos, puede prevenir enfermedades y mejorar tu salud

La experiencia de años en diferentes clínicas dedicadas al ayuno como las clínicas Buchinguer donde una gran parte de personas comenzaron a realizar ayunos para mejorar su salud, se dieron cuenta que uno de los efectos rebote era el rejuvenecimiento.

Hoy en día muchas personas realizar ayuno precisamente por ese efecto rejuvenecimiento que aporta el ayuno. A pesar de que ya se sabia y las personas que ayunaban siguiendo unos protocolos de salud ven esos beneficios en su organismo. Un estudio científico realizado por médicos japoneses da luz a este efecto rejuvenecedor (antioxidante) del cuerpo.

El ayuno intermitente es reconocido por beneficiarnos en muchos aspectos, como en la reducción de peso, grasa corporal y colesterol o el aumento de energía y de la función cognitiva.

Tal vez por eso investigadores decidieron ir más allá y estudiar sus efectos en nuestro reloj biológico.

Aunque existen trabajos que muestran como el ayuno puede aumentar la vida útil, la evidencia no se ha comprobado.

Un estudio publicado en Scientific Reports por científicos del Instituto de Graduados de Ciencia y Tecnología de Okinawa, Japón, analizó el ayuno en humanos y ofreció una nueva perspectiva.

«Estudios recientes sobre el envejecimiento han demostrado que la restricción calórica y el ayuno tienen un efecto prolongado en la vida útil de los animales modelo», dijo el autor principal del trabajo, el Dr. Takayuki Teruya.

Para llevar adelante este trabajo, los investigadores mantuvieron en ayuno durante 58 horas a 4 voluntarios.

Valiéndose de la medición de los metabolitos (sustancias que se generan durante los cambios físicos y químicos que se producen en el ayuno), los expertos analizaron muestras de sangre de los participantes.

¿Cómo funciona?

El ayuno es un fenómeno natural para la mayoría de los animales, ya que la comida no siempre se encuentra disponible. Cuando esto sucede, se producen cambios metabólicos inducidos por diferentes factores, para permitir que el cuerpo se adapte.

Normalmente, los carbohidratos suelen ser los primeros en utilizarse, en caso de agotarse, nuestro cuerpo lleva a cabo un proceso llamado gluconeogénesis, donde obtiene glucosa de otras moléculas.

Los científicos pueden encontrar evidencia de este proceso al evaluar los niveles de ciertos metabolitos en la sangre, como carnitinas y butirato.

Los análisis de sangre realizados durante el trabajo de Teruya, no solo encontraron aumentos en los niveles de esos metabolitos, sino en otros productos químicos.

Esto sugiere que el ayuno genera que las células cambien el tipo y la cantidad de proteínas que necesitan para funcionar.

Favorece los compuestos antiedad

En un estudio anterior, el mismo equipo de investigadores encontró que a medida que envejecemos, varios metabolitos disminuyen. Pero, en su último estudio demostraron que estos se vieron impulsados al practicar el ayuno.

En las muestras de los participantes, los investigadores identificaron 44 metabolitos que aumentaron durante el ayuno, algunos de los cuales aumentaron 60 veces.

Los autores detallaron que el ayuno parece provocar un estado metabólicamente mucho más activo de lo que se creía previamente.

«Estos son metabolitos muy importantes para el mantenimiento de la actividad muscular y antioxidante. Este resultado sugiere la posibilidad de un efecto rejuvenecedor con el ayuno, que hasta ahora no se conocía» afirmó el Dr. Takayuki Teruya.

De hecho, los investigadores notaron aumentos sustanciales en ciertos antioxidantes, como la ergotioneína y la carnosina.

Los especialistas creen que un aumento en los antioxidantes podría ser una respuesta de supervivencia. Durante la inanición, nuestros cuerpos pueden experimentar altos niveles de estrés oxidativo.

Al producir antioxidantes, podría ayudar a evitar algunos de los daños potenciales causados por los radicales libres.